Hoy he revisado a fondo mi azalea y nada más tocar lo que parecía un sari sano y perfectamente cicatrizado, e incluso sellado tiempo atrás en algunas zonas (desconozco si saneadas previamente de forma rigurosa), he descubierto que debajo la cosa estaba un tanto preocupante.
Descompuesta en gran medida la madera y una colonia de inquilinos responsables, juntamente con la humedad, de tal situación.
De manera que inmediatamente a sanear toda la madera en mal estado, rascar cepillar, limpiar y aplicar polisulfuro.
He aprovechado ya, para limpiar también el sustrato, retirar los restos de abono viejo y reponer otro nuevo.
En poco más de un par de meses le toca trasplante y es necesario que llegue lo más fuerte posible.
También le he limpiado el musgo y el verdín del nebari........ Espléndido nebari, por cierto.
Tras cuatro horas de intervención en la madera y en un aclarado y posicionado del verde, este es el aspecto de su parte trasera, a falta aún de un intenso y minucioso alambrado..........
Pero eso sera otro día.
Como consecuencia del saneado realizado, ha resultado un árbol nuevo con una más que atractiva oquedad, lo que tal vez me haga plantearme ahora su mejor frente. Por un lado el actual, con un potente nebari y por otro, este con un gran atractivo y aspecto de vejez. El condicionante radicará en la inclinación, que me será imposible de cambiar.
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Con razón comentabas que estaba triste.
ResponderEliminarCuidala bien.
Un abrazo.
Asi lo haré, Angel.
ResponderEliminarSoy de la opinión de que todo cuanto se tiene, hay que cuidarlo bien ...... los buenos árboles, los arbolitos.... y los amigos.
Un abrazo.
Vaya susto, pero el resultado ha quedado muy natural; preciosa azalea.
ResponderEliminarSaludos.
Coincido contigo, Tomeu.-
ResponderEliminarCreo que natural es la palabra que lo define.
El gran objetivo en el bonsai es el lograr naturalidad..... en definitiva, credibilidad.
Gracias.
Que quieres que te diga...eso es lo que tiene la naturaleza, que le da ese toque ya no sólo a los árboles sino también a nuestros bonsais que hace que resulten muy naturales, bien sea mediante el paso del tiempo, las inclemencias metereológicas o bien mediante los mencionados bichitos. Así que ya les estan dando las gracias y mandandomelos para acá porque...menudo peazo shari tan chulo. Aunque la limpia que le has dado tambien tendrá algo que ver digo yo jejeje.
ResponderEliminar¡Pero que azalea!. fiifiuuuh.
Cuanta razón tienes, amigo Alberto.-
ResponderEliminarNo he sido yo, sino ellos los que le han dado este caracter a mi azalea.
Ahora los tengo a destajo haciendome lo mismo en unos pinos...... cuando terminen, para allá que los mando.
Con lo finos que son trabajando la madera, no les va a faltar curro.
Un abrazo.