Amar el bonsai, presupone amor a la Naturaleza. No se concibe de otra manera.Nosotros admiramos y tratamos de copiar, tan solo, sus "grandes bonsais", sus impresionantes obras maestras de modelado.Os muestro algunas de las fotos que hice en la mañana de ayer, durante una otoñal caminata.
Hemos visto, ¡Alegría!, dar el viento
gloria final a las hojas doradas.
Arder, fundirse el monte en llamaradas
crepusculares, trágico y sangriento.
Gira, asciende, enloquece pensamiento.
Hoy da el otoño suelta a sus manadas.
No sientes a lo lejos sus pisadas?.
Pasan, dejando el campo amarillento.
Por esto, por sentirnos todavía
música y viento y hojas..... ¡Alegría!
José Hierro.