Ayer me llegaron los Reyes. Ayer volví a sentirme como un niño. Ayer reviví aquella ilusión de aquel tren de madera....... Ayer, un amigo mallorquín me ha hecho un gran regalo de Reyes. No me a bajado por la chimenea..... no cabría, me ha llegado (cosas de los nuevos tiempos), por una agencia de trasportes.
Ilusionado y un poco nervioso, he ido desenvolviendo el cuidadosamente forrado paquete.

¡¡Oh sorpresa !!! Pedazo bicho !!!!. Un expléndido ullastre con una de las maderas más espectaculares que he visto.
Llena de oquedades que se comunican y con una base de 52 centímetros de longitud, como nebari. Detrás sale de más ancha a menos, la vena viva que termina en una sección de 5 centímetros de diámentro.




Cuido de mantenerlo húmedo mientras construyo el cajón y me dispongo a plantarlo.

Primeramente, en la zona viva, le practico un anillo de oproximadamente un centímetro, por donde debe emitir las raíces y aplico un poco de hormonas.

Cuido especialmente el anclaje, aprovechando cualquier muñón que pueda utilizar y lo planto en un sustrato compuesto por pomice y volcánica en proporción 60-40.

La interesante madera que tiene todo él, no luce en toda su belleza, por el color oscuro y sin limpiar que en este momento tiene. En un futuro, bien limpia y tratada..... será otra cosa.


Ya solo queda humedecerle profundamente y "encapucharle".


Esta va a ser su ubicación. En el garaje, sobre mi banco de trabajo y cerquita del calorcillo de la caldera.

Para mi esta experiencia supone un interesante reto personal, por ser la primer vez que trato de enraizar un árbol de esta especie y de estas características. Comprensible pues mi ilusión y sacaré conocimientos que aprovecharé para trasmitir o quienes vengan detrás o comiencen en este maravilloso mundo.
Es de esperar que los resultados sean positivos, dado el alto porcentaje de éxito que con esta especie se obtiene.