martes, 18 de junio de 2013

UN DAIZA PARA MI WESTY

 
 
Esta piedra, desde luego que es merecedora sobradamente a tener su daiza y lo es ya desde hace tiempo, lo que pasa es que las mil ocupaciones que uno tiene lo han impedido hasta hace unos días.
 
En esta ocasión y por vez primera he elegido una madera de tejo, con un defecto natural que respetaré y que pienso le conferirá al daiza un carácter añadido muy interesante a mi juicio.
 
 
 
 
 
Fresa, gubia, formón y pruebas y más pruebas.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Tanto Jara como Perla, no se quieren perder detalle.
 
 
 
 
La dureza y lo compacto de esta madera, hacen que se trabaje muy bien, en contra de lo que yo suponía. Posicionado de las patas, lija... mucha lija y probar continuamente.
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
Poco a poco el daiza va tomando su forma definitiva.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Y finalmente, aquí veis su parte trasera, en efecto, creo que interesante
 
 
 



Y ya el frente, con esta preciosa figura, que tanto me recuerda a Puka, la que fue mi adorable perrita Westy





jueves, 6 de junio de 2013

ENTRE AMIGOS Y BONSAIS.

 
Cuando llegamos a casa de Ángel, el horno de Pereruela ya " arroxaba". A la derecha atónitos los arbolitos suponía que se estaba preparando  un abono que no parecía para ellos. Tampoco parecía ser de liberación lenta..... sino más bien de efecto inmediato.
 
 
 
 
No les faltaba razón. En la mesa a la izquierda del horno, esta cazuela de " aminoácidos" en forma de cordero lechal traído de Tielve  (Picos de Europa), además de otra del mismo tamaño de pollo adobadito y listo para entrar en el de Pereruela.
 
 
 
 
Como el proceso lleva su tiempo y como la casa de Ángel y Mari Sol es un verdadero jardín botánico, cuidado con gran mimo por ambos.... pues a disfrutar de él, de sus arbolines (como a él le gusta llamarlos) y de sus preciosas plantas de acento, casi todas en macetas salidas de sus manos, siempre rodeado de flores exuberantes en esta época.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
El olor ya no me deja hacer más fotos, El cordero tiene una pinta que ya no lo reconocerían ni en Tielve y el pollo otro tanto.
 
 
 





De postre ellas (maravillosas ellas siempre...) han preparado un par de tartas para endulzar la sobremesa, acompañadas por un excelente licor de Cilantro.

 
 
 
 
 
 
Creo que lo de los bonsáis ha sido en esta ocasión, solo un pretexto para darnos un homenaje.
 
 




Gran cosa esta de la AMISTAD. No en vano, en el libro de nuestra vida, las páginas más bellas son las que hablan de los amigos.