Si me permitís, hoy voy a redactar la entrada pensando en aquellos días cuando yo daba mis primeros pasos en este mundo del bonsai y buscaba en Internet artículos, entradas en distintos blogs, comentarios.... etc. todo lo que me pudiese servir para aprender. Pienso, como digo, en algún principiante que desconozca la manera de hacer acodos, que casualmente visite este humilde blog y si esto le resulta útil para aumentar sus conocimientos sobre las distintas técnicas en el bonsai,pues habrá merecido la pena. A los habituales os pido disculpas por lo detallado y extenso que pueda pareceros.
Cuando se recuperó este Prunus Mahaleb, debió darsele una poda más baja, máxime en esta especie que suele brotar abundantemente por cualquier lugar de las partes del tronco, pero bueno, no se hizo y ahora, tres años después es el momento ideal para reducirle en altura y además aprovechando sus ramas para sacar nuevos árboles, mediante la técnica del acodo.
El árbol en cuestión es un ejemplar potente, de esos de "cuatro manos", con muy buena corteza y buen nebari, pero con unos brazos demasiado largos, como veis.
En la rama que vamos a acodar, elegimos el lugar exacto en que realizaremos el anillo en la corteza, en función de la zona donde tenga si es posible un engrosamiento, aunque sea leve o algún detalle de carácter, pensando en obtener el nuevo árbol con algo de nebari, aunque sea mínimo.
Cortamos la corteza en su totalidad hasta llegar a la madera, con unos cortes limpios sobre todo en la zona superior, donde ha de emitir raíces.
Para eliminar completamente los restos de sabia, que pudiesen "puentear" los cortes superior he inferior, es necesario rascar bien la madera, ( debe darse importancia a este tema ).
Inclusive haremos con alambre un torniquete en la parte baja, para asegurar la no circulación hacia arriba de la sabia. Si se rasca bien el anillo y se es cuidadoso de no manchar todo con las hormonas, no es imprescindible este paso..... pero no hará ningún perjuicio en todo caso.
Aplicamos con un pincel las hormonas de enraizamiento en la zona donde pretendemos que emita las raíces, procurando que no chorreen hacia abajo.
Envolvemos el anillo a modo de bola, con musgo de pelo largo humedecido.
y cubrimos con un plástico fino trasparente, que nos permitirá ver a través de él en el futuro, la evolución del nacimiento de raíces.
Colocamos un segundo plástico, este negro para crear un ambiente sin luz, necesario para el enraizado.
En un mismo árbol se pueden hacer varios acodos, incluso en la misma rama a diferentes alturas. En esta otra rama realizaré otro, inmediatamente por debajo de ese shari.
Y aquí está el árbol con ambos acodos. Ahora a esperar hasta Primeros de Julio aproximadamente, para separarlos de la planta madre.
Retiro pacientemente el musgo que había colonizado el tronco y la parte inferior de las ramas. El musgo impide la emisión de nuevos brotes y estos nos van a ser necesarios.
Cuando llegue el momento de retirar ambos acodos, quedais citados a la entrada en que por supuesto mostraré los resultados obtenidos.